A ver. Esta es la primera y última vez que lo voy a decir. Y no pienso volver a hablar del tema. El espíritu mundialista que invade las calles y los avisos de televisión me tiene cansada. Con todas esas canciones, y esos goles, y esas emociones, y la gente abrazándose con sus vinchitas con banderitas argentinas. Y lo peor de todo, es que el mundial todavía no empezó. Si, mundial. Te lo escribo así con minúscula. “Nosotros respetamos que tengas un problema ideológico con los mundiales, pero escribílo con mayúscula porque va con mayúscula, y sino la correctora hace el doble del trabajo”, me dijo mi jefa. mundial, va con minúscula. Mirá como lo escribo con minúscula. mundial mundial mundial Vení a corregir a mi blog. Dale, vení.