Skip to main content

Loca y Norte I : Ajustáte el cinturón

No tengo ninguna pista sobre la causa que me impulsó a elegir el destino. Lo único que se, es que algún día del mes de agosto empecé a decir que me iba a ir de vacaciones al norte. No se porqué. No me inspiraron fotos de alguno de los paisajes, ni un testimonio de alguien que haya estado ahí. No se de dónde saqué la idea. Lo que cierto es que, un 15 de febrero estaba sacando pasaje para viajar el 17 a Jujuy.

De casualidad, por esos días andaba dando vueltas por el norte mi amigo Edu. En Buenos Aires habíamos acordado encontrarnos en alguna parte del camino para recorrer un tramo del trayecto juntos. Ni bien tuve el pasaje en la mano, le mandé un mail confirmando que el 18 estaría llegando a Jujuy. Al día siguiente, recibí como respuesta que no estaba seguro si podría pasar a buscarme.
Así las cosas, armé la valija, le dejé a Almendra algunas recomendaciones para que pase de vez en cuando por el departamento a ver al gato, cerré la puerta y me fui.
Durante las 20 horas que duró el viaje tuve de compañera de asiento a una tucumana de unos 40 y tantos, soltera, que venía de sus vacaciones en San Bernardo con unas amigas que se habían quedado en Buenos Aires. Era médica, profesora de educación sexual en un secundario de Tucumán y no paraba de cebarme unos mates dulcísimos.
Hablaba hasta por los codos, se reía y contaba unas anécdotas inverosímiles de sus vacaciones por la costa. Confieso que en algún momento tuve miedo de que haya puesto alguna droga en los mates para dormirme y sacarme toda la plata que llevaba (que tampoco era tanta, pero era toda la que tenía para mis vacaciones) , pero se me pasó rápido. A esa médica tucumana, de quien no recuerdo el nombre, le debo frases memorables como:

“La gente se deprime porque no coje… Qué trastorno bipolar ni trastorno bipolar.. que garchen y van a ver cómo se les pasa todo”….

Comments

Anonymous said…
Mi ego esta desmoronado, Te Odio , escribis relamente lindo . Coscachotes felicitando.
FL said…
Jajajajajajajaja
Se ve que la señora dejó su bipolaridad en San Bernardo.
lauruguacha said…
Y...es como dice mi compatriota, el gran Mario: para no caer en la tentación del precipicio el mejor tratamiento es el fornicio...
Juan Ignacio said…
Jajajajaj, clarooo! que duda hay sobre eso??? Pienso que el coger soluciona el 90 por ciento de nuestros problemas animicos.

Beso!

PD: hummm no estoy en tus links? jaja
Anonymous said…
la99 says: nena ya volvi
que tal unos mates tarderos el finde de fotos e historias veraniegas?
Karla said…
jajaja !!! Amén.

yo opino que eso es verdad, que dolores, ni trastornos, ni achaques ni nada...todo se pasa con un "cariñito".
Loca_Sola said…
Coscacho: ey... gracias, pero no es para tanto, y no me odie, por favor.. le mando saludos.
Fodor: y no sabés las cosas que me contó!.. la sra (o srita bah, decía que nunca se iba a casar) deberia de escribir un blog, si, si.
Lauruguacha: jaaaa.. muy cierto, si..beso!
Juan: jaaja.. a veces si, y a veces el problema comienza cuando te despertás al otro día. Ya te expliqué lo de los links, ya vas a estar!!.. paciencia!!
La99: me parece perfecto.. dale! te mensajeo y arreglamos! beso!
Karla: jaja. si!!.. beso!
Me ha pasado lo mismo.
Algún día te mostraré imágenes.
Me tomé el atrevimiento de sentirme inspirado por una frase tuya.
Está en mi blog.
Gracias.

Abrazo Rockero

Popular posts from this blog

No, Marcela no está.

La firmante declara que los hechos que se narrarán a continuación ocurrieron en las primeras horas del domingo, y que bajo ninguna circunstancia se encontraba bajo los efectos de ningún estimulante. Siendo las 12.30 de la madrugada del domingo, suena el portero del departamento que comparto con gato. Era Lula. Me pongo mis pantuflas rojas con corazón azul y bajo a abrirle la puerta. Cuando me dispongo a abrir la puerta de entrada, diviso que detrás de Lula aparece un sujeto, de unos 35 años, castaño de tez blanca. Pensando que tal vez el sujeto estaría aprovechando que abriese la puerta para entrar al edificio, esperé a que sacase la llave (si es que vivía en el lugar) o en su defecto tocase el portero. Pero nada de eso ocurrió. El sujeto miró a Lula y le preguntó en un tono coloquial: -¿Está Marcela?!. Ante esta pregunta, Lula entre asombrada, risueña y algo asustada, me mira a mí, lo mira al sujeto y le dice: -No sé de lo que me está hablando. Tras la respuesta, el sujeto me mira a m
No hay muestra mayor de compromiso que dar las llaves de la casa, departamento, habitación de pensión, lo que sea que fuese la morada de una. El compromiso no se demuestra con hechos, con presentar la familia, ni siquiera con un anillo. No. Darle las llaves a otro no es un hecho dejado al azar, no es una cuestión de practicidad, no es “para no bajar a abrir a la mañana”, para “que le vayas a cambiar las piedritas al gato”. No. Dar las llaves es “dar las llaves”. A razón de verdad, yo di mis llaves una sola vez. Fue un acto ingenuo, casi obligado y con el que cargué mucho tiempo. El también me dio sus llaves. Finalmente, el devenir de los hechos hizo que sus llaves terminaran fundiéndose con muchas otras en el Monumento al Che, las mías vaya a saber dónde, pero bueno, ese es otro tema. Por eso, yo ahora ando con mi par de llaves, otro en la casa de Almendra y otro en lo de Perro. Nada más. Ni a mi madre. Las llaves son una cuestión muy íntima. Y hace un par de semanas, cuando le quise b

Pesadilla

 Te me apareciste en un sueño. Yo te decía que por favor tuvieras cuidado porque en los próximos meses te ibas a morir. Vos me decías: ¡¿qué?! Mientras te reías en esa media lengua que mantenía lo universal de la sonrisa compartida.  Y te seguías riendo, como si fuera un disparate.   Y sí, lo era. Y sí, aún lo sigue siendo. Aunque sea increíblemente real.