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Y afuera hace frío y está la luna

Lo último que veo antes de dormir es el tatuaje. El tatuaje que está en su brazo que me abraza como el último acto del día, de ese día, pero como algo natural que se hubiera repetido todas las noches, de todos los días, de todos los siglos del universo.
Y su brazo me abraza mientras fijo la vista en su tatuaje y lucho contra las fuerzas que me quieren llevar del lado de los sueños; la frontera en donde la conciencia me abandona.
Pero es inútil luchar, los ojos se van cerrando como hipnotizados por el tatuaje en el antebrazo, el tatuaje de un sol que me mira y sonríe.
Y mientras el sol me mira y me abraza, me dejo abandonar a la cálida sensación hipnótica del sueño, del calor del sol y del abrazo; me dejo caer al abismo del sueño y de su abrazo.
De un brazo que me abraza y me salva del abismo de la vigilia, pero me acompaña a hundirme en las bondades del sueño. De un sol que me ofrece el calor para arrojarme al descanso necesario, a pesar de que afuera hace frío y está la luna.

Comments

la99 said…
poetiza
y vos, te harias uno?
Juan Ignacio said…
Un poeta y escritor español una vez dijo "La luna, complice de la muerte"... y tienen razon.
Guil Astobiza said…
paradójico.
Qué lindo que haya un brazo que la abrace.
No lo pensó?
Mas allá de tatoo, claro.
Un beso
Lucy.-
lauruguacha said…
Uy! Qué feo que es salir del cálido abrazo para meterse en el mundo cruel...
Loca_Sola said…
la99: mirá que lo pensé muuhchas veces, pero no, creo que no.beso!
Juan: :) gracias por pasar Juan, y aportar tan lindos comentarios. Beso!
Thales: ajá, si, si, Saludos!
Lucy: si, lo pensé y lo agradezco, y le agradezco tambien a ud por pasar.
uru: si, ni hablar! Saludos

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